La biopsia intraoperatoria, también conocida como biopsia rápida, consiste en el análisis inmediato de tejidos durante una cirugía. A diferencia de otros procedimientos, proporciona información diagnóstica crucial en tiempo real, ayudando al cirujano a tomar
decisiones intraoperatorias.
Este procedimiento se utiliza para confirmar diagnósticos, determinar márgenes quirúrgicos y evaluar la extensión de una enfermedad. La muestra de tejido se obtiene directamente durante la cirugía, asegurando una evaluación rápida y precisa.
En el laboratorio, las muestras se procesan rápidamente y se tiñen con hematoxilina-eosina y/o azul de toluidina, técnicas que permiten una visualización clara y detallada de la estructura celular y los componentes tisulares. Esta evaluación inmediata es realizada por patólogos, quienes proporcionan un diagnóstico preliminar que puede influir en el curso de la cirugía.